Bienvenidos a la Era del Caos
Desde un tiempo, relativamente corto, vengo observando cómo a muchas compañeras de profesión escrituril les cierran sus cuentas en Amazon, pierden ventas de forma estrepitosa en las plataformas y/o sufren de una cancelación brutal sobre su trabajo. Sin estar ya en grupos tanto de lectura como de escritura, me asombra, y me perturba a partes iguales, el color que todo esto está tomando.
Posiblemente, este post me genere bastante haters, pero debía hablar sobre ellos.
Cierre de cuentas y descenso de ventas
No es el primer vídeo con el que me encuentro, en menos de seis meses, de alguna escritora que se ve en la obligación de salir en las redes a denunciar malas prácticas por parte de supuestos haters/lectores. O quien se ve empujada a informar a sus lectores de que le han cerrado su cuenta de Amazon, de la noche a la mañana y sin darle ninguna explicación.
Amazon te cierra el chiringuito y no hay pataleta ni poder divino que te lo devuelva.
¿Quién está detrás de todo esto?
Hay quien dice que es cosa de los algoritmos, que han cambiado. Que se ha modificado la forma en la que los escritores obteníamos visibilidad con nuestros libros en plataformas como Amazon.
Otros dicen que es cosa de las editoriales, que pagan a legiones de haters para destruir la carrera profesional de los autopublicados.
¿En serio?
¿De verdad os creéis que las editoriales van a invertir tiempo y dinero en este tipo de práxis porque nos consideran uan competencia peligrosísima? Analizarlo bien, no tiene sentido alguno. No digo que no pueda ser posible, tan solo improbable.
Esto viene desde la propia comunidad de autopublicados.
Aquí es donde me caerá mucho hate, lo asumo, pero sigue leyendo y entenderás mi pensamiento.
Mi experiencia personal
Un día, recibo un mensaje en el que se me decía, y cito textualmente, “O haces ESTO o van a ir a por ti”. No hice nada, ni caso. Lo dejé en el cajón del olvido porque siempre actúo así con este tipo de amenazas veladas y vacías. ¡CRASO ERROR!
Al mes siguiente, mis ingresos sufrieron un descenso del 50% y durante los siguientes seis meses bajaron hasta casi el 90%. ¿Asusta, eh? Pues, imaginaros a mí, que eran mis únicos ingresos. Con todo listo para crear mi propia empresa, me vi obligada a dar marcha atrás con el papeleo y todo eso produjo una serie de sucesos caóticos en cadena (tuve que vender mi casa, volver con mi padre, perder mis ingresos, perder a mi perra).
Hablé con Amazon, todo lo encontraban correcto, salvo por una serie de denuncias que hubo durante unos meses seguidos. Eso, según me explicaron, ocasionó un cambio en el algoritmo mortal: Me volví invisible.
No contentos con esos hechos, me llegaron a acusar de plagiar a otra escritora. Así, sin más, una persona (muy aburrida en su vida diaria) decidió que sería interesante comentar de forma pública que algunas de mis novelas eran plagios de otras del mismo género.
¡Oh, sorpresa! ¡La novela de romance histórico escocés no es algo nuevo, ni exclusivo de una única autora!
Yo no entré en polémica, no suelo contestar a estas mentiras, pero tengo unas lectoras maravillosas que se encargaron de quitarle las ganas de decir más tonterías. Y, cómo no, tuve un pequeña subidón de regalías porque hubo gente que sintió curiosidad y se leyó mis novelas. Algunas, incluso, se han quedado en mi universo lector porque les he gustado como escritora.
No hay mal que por bien no venga.
Esto no son meras críticas negativas
No me malinterpretéis, no hablo de las críticas o reseñas negativas sobre una novela. Hablo de denuncias en bloque de un libro o cuenta de autor, provocando, en consecuencia, el cierre y la pérdida de ingresos de una persona.
Una cosa es el feedback que te puedan dar los lectores, tanto positivo como negativo (de todas las críticas se aprende), y otra muy diferente es que un grupo de personas se dediquen a hundir la trayectoria laboral de una persona por Patata.
Es Bullying
Según todas las definiciones existentes sobre esta palabra, el bullying o acoso es toda forma de maltrato físico, verbal o psicológico para ejercer poder sobre otra persona. Y existen muchas formas de realizar estas prácticas.
Por lo tanto, denunciar de forma anónima, y en un bloque de varias personas, buscanod el hunidimiento de la carrera profesional de alguien es bullying.
Si estamos en la Era del Cero Acoso, ¿qué está pasando aquí? ¿Cero acoso, pero solo con los que me caen bien o son de mi correa? Sinceramente, eso es de hipócritas de manual y creo que ya va siendo hora de que hagamos TODOS un ejercicio de conciencia importante porque nos estamos cargando las ilusiones de muchas personas que te pueden gustar o menos, pero no te impiden llevar una vida tranquila en tu día a día.
Darle una vuelta a este tema. Es importante, mucho. La salud mental no es broma y creedme, se ve muy dañada con una experiencia así. El perdón en la tumba no sirve de nada.
¡Vamos a denunciar sus libros para que le cierren la cuenta!
¡Todos a una, Fuenteovejuna!